Sabores de la Costa Nayarita

“El Pacífico en un plato: explorando los sabores de Chacala”...

Chacala no solo es un destino de playa, es una experiencia gastronómica que te conecta con la tierra y el mar. Al llegar a este pequeño paraíso en la Riviera Nayarit, uno no tarda en descubrir que la comida aquí tiene un alma especial. 

En Chacala, cada comida es una travesía marina. Este pequeño paraíso en la costa de Nayarit ofrece algo más que playas doradas y puestas de sol perfectas: aquí, la gastronomía es un viaje profundo a la esencia del Pacífico mexicano. No se trata de platos lujosos ni de técnicas sofisticadas: es cocina de raíz, de tradición, de fuego y sal.

La estrella del lugar es, sin duda, el pescado zarandeado: abierto en mariposa, marinado con especias locales y asado lentamente sobre brasas de leña. Cada mordida es un canto a lo ancestral, a los saberes que no necesitan receta porque viven en la memoria de los pobladores.

Uno de los grandes protagonistas es el pescado zarandeado, cocido lentamente al carbón sobre rejillas de varilla, marinado con achiote, ajo, limón y especias locales. El sabor ahumado se funde con la jugosidad del pescado fresco —generalmente robalo o pargo rojo— creando una experiencia que no se olvida. Pero no todo se queda ahí. El ceviche de camarón, preparado al momento con jitomate, cebolla morada, pepino y chile serrano, se convierte en una explosión deleitante, acompañado con tostadas crujientes, aguacate maduro y un toque de limón, este platillo resume la identidad costera del pueblo, ya que son un festival de frescura, con cítricos que despiertan el apetito y chiles que elevan el alma. Y si te aventuras a probar los tacos de marlín ahumado, descubrirás que aquí el mar se fuma, se enrolla en una tortilla y se sirve con salsa de chile piquín.

En Chacala, el mar no solo se admira, se come, se honra y se agradece.